Esta majestuosa vivienda se emplaza en un tranquilo barrio residencial próximo a la ciudad de Valencia.

La parcela cuenta con un acusado desnivel en el linde suroeste que propicia que su diseño contemple un amplio sótano, que sumado a las plantas baja y primera suponen un total de 370m2 de superficie útil.

De esta vivienda modular de altas calidades destaca el marcado carácter mediterráneo que se consigue gracias al contraste de la pulcritud de las fachadas blancas con la piedra caliza que envuelve toda la planta baja, actuando a modo de zócalo. Esta combinación de texturas sumado a la armoniosa superposición de volúmenes da como resultado una vivienda de líneas contemporáneas, pero de estilo atemporal que no deja indiferente a nadie.